21/11/2024

Venezuela: el triunfo electoral del Polo Patriótico, con Nicolás Maduro presidente; unión cívico-militar, hacia una nueva sociedad

“Desde nuestra organización – IV Internacional (leninista-trotskista-posadista) – dirigimos un llamado a todos los pueblos de la región y el mundo al apoyo sin condiciones y a la defensa del pueblo y gobierno revolucionarios de Venezuela. No caer jamás en la mediocridad de una política “blandengue y merengada”, como decía Fidel Castro”.

IV INTERNACIONAL (LENINISTA-TROTSKISTA-POSADISTA)

Saludamos las elecciones presidenciales en Venezuela con el triunfo del Polo Patriótico en la elección a la Presidencia de la Republica, desde el año 2025 y hasta 2031, del camarada Nicolás Maduro Moros. Elecciones que son expresión directa y material de la lucha del pueblo venezolano, que se afirma en su progreso de unidad cívico militar, de una “revolución pacífica pero armada” (Hugo Chávez), como en las condiciones de vida, no solo en un país, sino de la lucha de clases en el mundo. Limitar estas elecciones a solo a una condición nacional de un pueblo, sería aislarlo, ignorando la unidad natural, lógica del curso social revolucionario en América latina y el mundo.

Los partidos que integramos la IV Internacional (Leninista-Trotskista-Posadista) hacemos la presente declaración conjunta, conteniendo fundamentos políticos, sociales, económicos, desde la realidad de todos los países, porque consideramos que, si bien, se votó en Venezuela, la fuerza y decisión, es la de todos los pueblos de la región y el mundo. Juzgamos que las elecciones en Venezuela son universales, son para la humanidad, en esta ocasión, realizadas en Venezuela, un pueblo y una nación agredidos por el imperialismo y secuaces internos. Como lo es Cuba desde hace décadas. En Venezuela, desde 1999, se decidió refundar la patria de Simón Bolívar como país libre e independiente. El pueblo bolivariano, con Hugo Chávez, decidió cambiar la podrida sociedad rentista, oligárquica, de cúpulas diligenciares, para pasar a luchar por una verdadera democracia social que represente los intereses de las mayorías que construyen desde su trabajo cotidiano, la realidad de progreso social. Esta condición continuó ocurriendo el último 28 de julio.

Lo que afirmen los organismos del sistema capitalista, como la OEA, el fenecido “Grupo de Lima” que ahora como un Lázaro, pretenden revivirlo, como vocero del imperialismo, etc. no cuentan con autoridad ni capacidad social para representar a los pueblos de la región. Desde ahí, es que consideramos al proceso electoral venezolano y su gobierno, representa las mismas luchas como también intereses de las clases que en el mundo, y en particular en América Latina representan la nueva sociedad en construcción.

Desde las nuevas relaciones de la economía y la política a través de los BRICS, que de hecho hacen a la presente, objetiva disputa, entre el viejo mundo occidental en decadencia, a sus podridas relaciones con el poder oligárquico que en Venezuela procura sostenerse en base a espurias políticas, tan explotadoras del trabajo humano como del derecho democrático del pueblo venezolano y su democracia.

Una democracia construida desde el progreso del combate a la política del neopopulismo, la desestabilización sistemática de la IV República, con la recuperación, desde la Vta. República y la gobernanza en una democracia representativa superior, que avanza a transformarse en popular y revolucionaria. Una conquista que, a gran esfuerzo social y político, realizó el pueblo venezolano desde el primer gobierno del Comandante Hugo Chávez Frías, 1999/2013, terminando con “la moribunda IV Republica” que no representaba el interés social, ni el curso de la vida de Venezuela.

EL FRACASO POLITICO DE LA ACUSACION DE FRAUDE, Y LA NECESARIA PROFUNDIZACIÓN REVOLUCIONARIA EN VENEZUELA, PROPUESTA POR EL PRESIDENTE NICOLAS MADURO, CON INTERVENCIÓN DE TODA LA POBLACIÓN

Ahora el imperialismo pretende, con un falso pretexto de “fraude electoral”, dar vida a la reacción política antipopular, de una dirigencia opositora diversa y socialmente débil, intentando posicionar “el fraude”, como política, tratando de impedir que asuma Nicolás Maduro Moros como Presidente electo, ya proclamado por el Consejo Nacional Electoral para un mandato que se cierra en el año 2031. Un manotazo de ahogado de la derecha extrema que viola en forma y contenido legal, la Constitución, al CNE, en su tiempo y desconoce el inviolable método de votación dentro del proceso de definición electoral.

Desconoce la oposición la Constitución, las leyes de Venezuela, queriendo retroceder la historia a época de la IV República y el clientelar fracasado bipartidismo, superado desde la constitución de la República Bolivariana de Venezuela,  como parte estructural del eje político, social y económico del curso social  de sinceramiento (1) de la historia en el mundo, en los tiempos y espacios de la lucha de clases, junto al nuevo rol de la democracia  social y conquista de la paz, que el pueblo venezolano, en su  mayoría, busca  desenvolver y consolidar.

El llamado a abrir el dialogo con todas las fuerzas políticas para conquistar paz que el presidente Nicolás Maduro proclamó con firma, el pasado 29 de julio de 2024, es un camino, un tránsito, para afirmar conquistas sociales, económicas y políticas del actual gobierno. Gobierno que deberá profundizar el poder de decisión de la población, el poder popular, desde las bases del pueblo y sus organizaciones. Al mismo tiempo que dejará en claro que las fuerzas que acudan a la convocatoria, a quienes y qué intereses representen. Desde el primer gobierno de Hugo Rafael Chávez Frías, esta ha sido la consigna para el progreso y afirmación del Poder Popular, superando enormes dificultades en la economía, el comercio exterior, etc. provocadas en gran medida por el criminal bloqueo imperialista a Venezuela.

La combatividad de la resistencia social y la confianza de la mayoría del pueblo venezolano, no solo se comprueba en logros recientes como lo es la estabilidad y el crecimiento económico, sino en que la población trabajadora ha venido sosteniendo durante 25 años el proceso revolucionario social del país. Como planteara Diosdado Cabello, ahora es necesario avanzar en la transparencia y pureza interiores del proceso, necesarias a afirmar la revolución, denunciando y combatiendo el burocratismo tanto como la corrupción, tareas que se encararon desde Hugo Chávez en adelante como esenciales a la revolución bolivariana.

Afirmación revolucionaria de una mayoría social y política en desarrollo, en que el papel de la unidad de fuerzas armadas y pueblo, hacen a la estructura progresiva del curso. Como lo formuló permanentemente el Comandante eterno Hugo Chávez: “somos una revolución pacífica, pero armada, para defenderla”.

Hoy, el presidente Nicolás Maduro, lo representa en su decisión política y confianza en el pueblo trabajador y en la nueva sociedad en construcción. El curso, en pleno desarrollo, se comprueba en el resultado de las elecciones del 28 de julio de 2024. Además, desnuda las aspiraciones de la derecha, con María Corina Machado mostrando cuál es el espurio interés de la clase que representa, acólitos del imperialismo.

El diálogo que plantea el presidente Nicolás Maduro se fundamenta a partir del curso actual sin retroceso, en búsqueda de un camino de paz social, donde intervenga toda la sociedad. Un curso que esta preñado por el progreso de Venezuela y su revolución, a pesar del sabotaje, bloqueo, chantajes, que organiza el imperialismo como cabeza del capitalismo mundial. Venezuela no conoce el retroceso ni claudicación, tampoco en la región, en el mundo, como lo muestra la intervención de Rusia -de base social soviética-, en Ucrania, sostenido en la concepción de la necesidad en la defensa de los pueblos, “la guerra preventiva” que fundamentó y aplica el presidente Vladimir Putin.

Desde nuestra organización – IV Internacional (leninista-trotskista-posadista) – dirigimos un llamado a todos los pueblos de la región y el mundo al apoyo sin condiciones y a la defensa del pueblo y gobierno revolucionarios de Venezuela. No caer jamás en la mediocridad de una política “blandengue y merengada”, como decía Fidel Castro. El problema no pasa por las actas electorales, sino en la direccionalidad del curso. Como plantea Diosdado Cabello “no podemos hacer una revolución con escuálidos en responsabilidades políticas dentro del Estado” (2). Un progreso que saludamos de la dirección del PSUV y el gobierno venezolano, una necesaria depuración que toda revolución debe encarar, para afirmar el proceso revolucionario.

LAS ELECCIONES DEL 28 DE JULIO  2024, LA PROPUESTA DEL DIALOGO SOCIAL, Y EL CURSO REVOLUCIONARIO

El sistema capitalista adopta como respuesta ante la crisis de su economía la implantación mundial de la peor de las dictaduras, que es la económica- social, porque no sólo reprime, sino que margina a la población trabajadora de poder encontrarle sentido a su existencia, empujándola a ser sólo carne de cañón descartable del sistema. Expropia a los trabajadores la resolución sobre su propia vida, sometiendo a la familia trabajadora a padecer todas las nefastas consecuencias de la descomposición capitalista, como sucede en Argentina, con el gobierno liberal de J. Milei.

La paz social no es un algoritmo informático establecido por el sistema capitalista, sino una conquista organizativa de la sociedad.  La paz social es un antecedente y condición revolucionaria de los pueblos de la región, por ejemplo, para su integración, incorporando todos los factores que expresan y desenvuelvan el progreso y la evolución de todos.

No existe “paz en abstracto”, y/o para unos pocos, como define el sistema capitalista, mientras masacra en Gaza, Líbano, o explota colonialmente, con empresas trasnacionales, a los pueblos de África, o América Latina La lucha por la paz es una tarea de los pueblos, sin enajenar su independencia nacional, ni de clase.

El pueblo venezolano decidió con el voto mayoritario, la continuidad del curso revolucionario, reeligiendo en la Presidencia de la Republica al camarada Nicolás Maduro Moros por el término de seis años. Un proceso no sólo selectivo en lo individual, sino también socialmente, instrumento, herramienta necesaria para las transformaciones que se plantea el gobierno del Gran Polo Patriótico, del PSUV: un programa para superar y derrotar el bloqueo imperialista y avanzar en la construcción de la nueva sociedad socialista.

PROPONEMOS CONSTRUIR AMPLIA SOLIDARIDAD MUNDIAL CON EL PUEBLO Y GOBIERNO DE VENEZUELA.

La defensa de Venezuela, como antes de Cuba, o Nicaragua, o Bolivia, México, en la región y el mundo, hace a la vida de toda la humanidad. Romper el bloqueo imperialista a Venezuela, como lo viene haciendo el sostén solidario de Rusia, China, Irán, etc., es una tarea revolucionaria de todos los pueblos. El imperialismo, el sistema capitalista, también aplica decisiones de coerción y extorsión a Rusia y su pueblo. En Venezuela hoy, se proponen impedir el progreso. Sin embargo, Rusia rompió el bloqueo económico: es el imperialismo, su dólar, son las empresas trasnacionales las que pierden.

El principal “fraude” es la explotación social del ser humano por un sistema inhumano, el capitalismo imperialista. Venezuela, su pueblo y gobierno, superando todas las adversidades del sistema, triunfará en el camino de la construcción socialista, como ya se percibe en el mundo con reiterados fracasos del Occidente imperialista – y por otro lado – el desarrollo de una Nueva Economía, concurrente al capitalismo. Economía solidaria, integrada, -no colonialista-, desde los BRICS, los Acuerdos de Shanghái, el Banco Euroasiático, la eliminación progresiva del poder hegemónico del dólar, el FMI, Banco Mundial, etcétera.

¡VENEZUELA NO ESTA NI PERMANECERA SOLA!

Buró Latino Americano de la IV Internacional (Leninista-Trotskista-Posadista)

Agosto de 2024

(1) El curso histórico se sincera, se transparenta la realidad tal cual es, se hace público lo que antes se mantenía oculto, en el comportamiento de las clases sociales, partidos, estados, movimientos sociales, culturales, etc.

(2) El diputado del PSUV Diosdado Cabello, pidió el jueves 25/07/24 en un acto en el Estado de Carabobo, a la militancia del partido de Gobierno, denunciar casos de entes públicos que estén dirigidos por opositores al Ejecutivo encabezado por Nicolás Maduro.

La presente nota editorial internacional forma parte de la edición Nro. 1056 de «Frente Obrero» del mes de agosto de 2024.

«Frente Obrero», que en 2024 cumple 71 años, es la publicación oficial del Partido Obrero Revolucionario, fundador e integrante del Frente Amplio y miembro de la IV Internacional (leninista-trotskista-posadista)