24/11/2024

LA INDEPENDENCIA POLITICA de SINDICATOS y PIT-CNT, OBLIGA a LA INDEPENDENCIA PROGRAMATICA

La polémica surgida en el seno de la Mesa Representativa y dirección del PIT CNT sobre contenidos de la oratoria del acto del 1o de mayo necesita ser dirimida en asambleas por lugar de trabajo de todos los sindicatos. El uso de redes sociales, TV, radios, prensa escrita debe conducir a la ampliación y profundización de la democracia obrera, sindical, de clase y de base.

Diferencias importantes existieron siempre entre diferentes corrientes del movimiento sindical antes de la unificación en una sola central obrera que en el 1965 al Congreso del Pueblo, cuando varios sindicatos convocan a gremios de estudiantes, cooperativas, organizaciones de jubilados, educación, cultura, pequeños productores, iglesias. Se aprueba un programa de transformaciones estructurales: reforma y revolución agraria, nacionalización de la banca extranjera y privada nacional, nacionalización de la industria frigorífica y el comercio exterior, junto a propuestas de transformación industrial, tributaria, superiores derechos para la clase obrera y trabajadora: salarios, vivienda, salud.

En 1966 el Congreso de unificación sindical aprueba el Programa resuelto en el Congreso del Pueblo y vota la declaración de principios de la Convención Nacional de Trabajadores (CNT) junto al Programa, y el Estatuto, estableciendo garantías de democracia sindical de base, independencia frente al Estado, empresarios, partidos políticos, la no afiliación a centrales sindicales regionales o mundiales, impulsando a la vez la unificación del movimiento organizado de los trabajadores del mundo. El movimiento obrero nacional no ha perdido ni su independencia de clase ni accionar de clase en defensa de sus conquistas y derechos: asume posiciones antiimperialistas, solidarias con los procesos nacionales, populares, democráticos y revolucionarios de la región y el mundo. El PIT CNT se transformó en legitimo continuador, reconocido, dentro y fuera del Uruguay, de la Convención Nacional de Trabajadores.

La central sindical necesita – creemos – prepararse para un progreso político y programático, apoyándose en lo más elevado del programa original, fundacional. Los sindicatos no han sido indiferentes a la política aplicada por los Gobiernos del Frente Amplio (2005-2019).

El movimiento obrero ha tenido tanto que ver con los triunfos sociales-electorales como con el programa y política en aplicación de los últimos tres Gobiernos nacionales. La legislación que interviene en los vínculos Estado-sindicatos-cámaras empresariales junto a una política exterior independiente desde el Poder Ejecutivo nacional, se explica, en gran medida, por el accionar de clase, independiente, del movimiento obrero.

El sindicato de municipales de Montevideo (Adeom) junto a otras direcciones sindicales propone – esta es la política constante de Adeom – llevar adelante una oratoria centrada en la crítica al Gobierno Nacional. Por derivación, quitar bases de sustento social y político organizado a la lucha por un cuarto Gobierno encabezado por el Frente Amplio. La independencia de la clase trabajadora se representa en su forma más madura en la propuesta política y programática. La mayoría de las corrientes representadas en la conducción de los sindicatos y el PIT CNT interviene sobre el proceso nacional que conduce el Gobierno del Frente Amplio “sin indiferencia”, sin auto marginarse, sin practicar sindicalismo a ultranza o bailando la danza de la oposición burguesa.

Apoyo crítico, sostén independiente, de clase. A nuestro criterio, es necesario evitar el agotamiento del proyecto político analizando el programa de la CNT fundacional, sobre el que Seregni declaro (16.03.1971) que fue la base del programa inicial del Frente Amplio. Los sindicatos y la central obrera vive un proceso crítico, de crecimiento, que no se resuelve básicamente estableciendo una cuota para la representación de las mujeres en la Mesa Representativa, o en la oratoria del 1o de mayo.

Los sindicatos, el PIT CNT necesitan retomar luchas comenzadas y no culminadas para la construcción desde las bases sociales, democrática, revolucionaria, de una nueva Constitución de la Republica, la representación obrera en los Directorios de los Entes estatales, la construcción de una flota pesquera nacional estatal, la lucha para mantener emprendimientos industriales en funcionamiento a cargo del Estado y con gestión obrera, planes de viviendas dignas accesibles, la inclusión – no la exclusión – de los trabajadores tercerizados en los sindicatos, junto a la movilización por un Salario Mínimo Vital, ajustado por inflación, que supere el muy escaso Salario Mínimo Nacional de los que quedan por fuera los Consejos de Salarios.

La independencia política frente al Estado, a los Gobiernos, no es considerar que da lo mismo para la población trabajadora, inmensamente mayoritaria, un Gobierno de los partidos del sistema capitalista, de las Cámaras Empresariales, que los Gobiernos del Frente Amplio. La central obrera superara en base a la democracia obrera, el operativo mediático, abrevando en su programa historia y original, fundacional. Porque no existe, de fondo, independencia política sino lo es también programática.

Montevideo, 21 de abril, 2019.